“El Ayuntamiento de Murcia encargó la realización de un estudio sobre la tarifa social en casos en los que los ciudadanos, en situación de pobreza, exclusión o vulnerabilidad, no pueden pagar la factura del agua. La respuesta era sencilla, tenemos que financiar el agua porque es un derecho humano”, estas palabras de Víctor Meseguer, director de la Cátedra Internacional de Responsabilidad Social Corporativa (RSC) de la UCAM, resumen el objetivo principal de la Jornada 'Tarifa Social del Agua'.La empresa Aguas de Murcia, que suministra el agua potable a la capital del Segura, fue la promotora de este estudio, que se ha realizado por primera vez y que se ha sustentado en llevar a cabo prácticas durante seis meses en el ámbito de la Unión Europea con un equipo formado por ocho investigadores, de los cuales casi el 50% representaba a la Universidad Católica de Murcia. La solución para este problema social es que las administraciones públicas, empresas concesionarias y organizaciones del tercer sector colaboren en la gestión de este servicio público ya que el agua es un derecho humano, un bien del que no se puede privar a ningún ser vivo, tal y como señaló Meseguer: “Tenemos que estudiar la fórmula a través de política de servicio social para ver cómo podemos hacer que la gente que se demuestre que no puede pagar la factura no pierda el acceso a este servicio tan básico”.Para concretar la solución propuesta, el director de la Cátedra de RSC de la UCAM apuntó que “el objetivo es que los servicios sociales evalúen la situación real de necesidad de esa familia y desde esos servicios se pague la factura. Es una clara evidencia de alianza público-privada para la conformación del bien común”.